Recent mitochondrial DNA (mtDNA) and morphological studies suggest that the Curve-billed Thrasher (Toxostoma curvirostre) consists of three historical groups, corresponding to the subspecies curvirostre and palmeri and a new taxon distributed in Oaxaca and Puebla. Previous mtDNA analysis did not include the subspecies T. c. insularum found on Tiburon Island (Sonora, Mexico). We collected new samples to address the distinctiveness of the three groups, to explore possible contact between the curvirostre and southern clades, to clarify the status of T. c. insularum, and to explore population histories of the major clades. Our mtDNA results confirm the existence of three major haplotype clades, which represent either two or three species depending on the species concept used. We interpret the occurrence of two mismatched haplotypes in Puebla and Oaxaca as recent gene flow. Haplotypes from Tiburon Island were intermixed within the palmeri clade, thereby failing to support the subspecies T. c. insularum. In contrast, principal components analysis of morphological data showed that insularum was distinct and, given the lack of mtDNA distinctiveness, suggests rapid phenotypic evolution on the island. The molecular data suggest that the widespread curvirostre clade has undergone recent population growth, whereas the other two clades appear to have been more stable.

Estudios recientes de ADN mitocondrial (ADNmt) y de morfología sugieren que Toxostoma curvirostre consiste de tres grupos históricos que corresponden con los grupos de las subespecies palmeri, curvirostre y un nuevo taxón distribuido en Oaxaca y el sur de Puebla. Análisis previos de ADNmt no incluyeron a T. c. insularum, subespecie endémica de la Isla Tiburón (Sonora, México). Colectamos ejemplares clave para evaluar el reconocimiento de los tres grupos, para explorar el posible contacto entre curvirostre y el clado del sur, para esclarecer el estatus de T. c. insularum y para explorar las historias poblacionales de estos grupos. Nuestros resultados confirman la existencia de tres grandes clados haplotípicos, los cuales representan dos o tres especies dependiendo del concepto de especie utilizado. Interpretamos como un flujo genético reciente la ocurrencia de haplotipos intercambiados en Puebla y Oaxaca. Los haplotipos de la Isla Tiburón se mezclaron con los del clado palmeri, fallando en dar soporte a su estatus como un distinto taxón. En contraste, los análisis de componentes principales de los datos morfológicos, mostraron que insularum es distinto, y dada la carencia de reconocimiento a través de ADNmt, sugiere una rápida evolución fenotípica en la Isla. Los datos moleculares sugieren que el clado curvirostre, ampliamente distribuido, ha experimentado un crecimiento poblacional reciente, mientras que los otros dos clados aparentan una mayor estabilidad.